PES dice adiós a la licencia de la Champions League

La lucha por las licencias de ligas y torneos en los videojuegos puede sufrir un giro inesperado, después de que Konami y la UEFA anunciaron el fin de su relación.

El fin del acuerdo entre la empresa desarrolladora de videojuegos y el organismo rector del futbol europeo representa un duro golpe para la franquicia Pro Evolution Soccer, que en los últimos años ha batallado por obtener las licencias de clubes o ligas imporantes.Desde hace casi 10 años, el PES tuvo los derechos para recrear la Champions League en su gameplay. Pero los aficionados a este videojuego ya no verán el característico balón con las estrellas. La relación entre Konami y UEFA se terminará después de la Final del torneo en Kiev.Si bien en 2015 Konami anunció una renovación del contrato hasta 2019, este miércoles ambas partes confirmaron la finalización de la colaboración."La licencia de la UEFA Champions League nos dio una plataforma para crear experiencias únicas y proporcionar a los aficionados al futbol en todo el mundo una oportunidad de disfrutar este torneo de primera mano. Sin embargo, este año pondremos nuestro enfoque en otras áreas", dijo el director de marca y desarrollo de negocio de Konami, Jonas Lygaard."Ha sido una sociedad muy cooperativa y mutuamente benéfica. UEFA quiere agradecer a Konami por su tremendo compromiso y apoyo a los torneos de clubes de UEFA durante la última década", comentó, por su parte, Guy-Laurent Epstein, director de marketing de UEFA Events.Tanto UEFA como Konami dejaron la puerta abierta a futuras colaboraciones. Según el comunicado, el acuerdo que termina solo incluye los torneos de clubes, es decir, la Champions, la Europa League y la Supercopa de Europa, ya que el organismo está dispuesto a trabajar con la compañía japonesa a nivel de selecciones nacionales.Antes de Konami, EA Sports tuvo la licencia entre 2004 y 2007. En ese entonces, se trataba de un videojuego separado al FIFA, aunque usaba el mismo motor.En cuanto a la Eurocopa, EA Sports contó con la licencia desde la edición 2000 hasta la 2012. Para Francia 2016, pasó a manos de Konami.