MakerBot creador de la impresora en 3D, enfrenta escepticismo

EU.- MakerBot, un fabricante de impresoras en tres dimensiones que abrió dos nuevas tiendas está semana, está entre las empresas que intentan llevar la innovadora tecnología de fabricación digital a los consumidores, pero los escépticos dicen que este despliegue es prematuro.

MakerBot, una filial de Stratsys, abrió tiendas esta semana en Boston y Greenwich, en el estado de Connecticut, las dos con el doble de superficie que el primer establecimiento de la firma, de unos 140 metros cuadrados en el centro de Manhattan. 

La compañía ofrece diseños para más de 100,000 elementos a través de la comunidad online de usuarios "Thingiverse". Los productos van desde baratijas como esculturas de zombies a joyería, desagües de fregaderos e incluso dispositivos médicos. Se imprimen usando fibras de plástico con base de maíz en más de una docena de colores.

"Para la mayoría de personas, la impresión en 3D es ciencia ficción futurista. Estamos aquí para hacerlo real", dijo el presidente ejecutivo de la empresa, Bre Pettis, que cortó la cinta en la tienda de Boston, en la calle Newbury, usando unas tijeras hechas en una de las impresoras Replicator de Marketbot, cuyo precio va desde los 2,199 dólares.

Pettis, quien ha comprado anuncios en revistas para promocionar las impresoras 3D como regalos de Navidad, cree que pronto podría haber una de estas máquinas en cada manzana de Estados Unidos.

Sin embargo algunos expertos en tecnología dicen que las impresoras 3D podrían no estar listas para el gran público porque siguen siendo menos fáciles de usar que la mayoría de los productos electrónicos de consumo modernos.

"Hay mucho despliegue publicitario", dijo Pete Basiliere, analista en la firma de investigación tecnológica Gartner. "La gente está un poco mal informada con respecto a lo fácil que es", agregó.

Desde su creación, el concepto de la impresión en tres dimensiones ha generado opiniones fuertes. Los críticos dice que la tecnología podría utilizarse para propósitos nefastos, como construir pistolas de plásticos y otras armas que no se puedan detectar.

Pero en una muestra de respaldo, el presidente Barack Obama dijo en febrero que la industria tiene el potencial de crear empleos y "revolucionar" caso todo lo que hacemos.