'Estaba en la cocina cuando escuché los disparos'

La tarde del miércoles, Abraham esperaba en la baqueta, afuera de su casa, que su esposa le sirviera la comida, para luego continuar con su jornada como albañil a dos calles de su domicilio.Nunca imaginó que serían los últimos momentos de su existencia, pues fue alcanzado por las balas, cuando varios desconocidos que viajaban en un taxi persiguieron y ejecutaron a dos jóvenes que intentaron refugiarse en la vivienda.?Cuando yo llegué a allí le dije que ya estaba lista la comida. Yo estaba en la cocina, y él me dijo que iba a estar sentado afuera, en lo que le preparaba la comida, y en eso fue cuando escuché muchos disparos?, relató la señora Adriana Hernández.

Tras ser blanco de los proyectiles, Abraham Arellano Monares, de 33 años, fue auxiliado por sus hermanos, quienes lo llevaron en un auto particular al hospital Universitario, pero no resistió.Su esposa y sus cuatro hijos, todos menores de edad, lo recuerdan como una persona trabajadora, que siempre se preocupó por el bienestar de su familia.?A veces yo me enojaba con él y le decía que nada más andaba en la calle, y él me contestaba que no, que andaba buscando en qué trabajar. Él siempre fue buena gente y era muy noble?, refirió el ama de casa.El joven albañil fue una víctima inocente de la delincuencia. Las autoridades nada saben hasta ahora de los responsables de este ataque.Los deudos dejan todo en manos de Dios.

La familia ha tenido serias dificultades para llevar a cabo el funeral de Abraham, por lo que apelaron a la voluntad de las autoridades estatales y municipales.El incidente que acabó con la vida de Arellano Monares ocurrió alrededor de las 14:00 horas del miércoles en la calle Huizache, casi esquina con 19 de Junio, en la colonia La Alianza, sector San Juan de Guadalupe.Varios desconocidos a bordo de un taxi perseguían a dos jóvenes que viajaban en una camioneta Silverado, quienes descendieron en ese lugar para tratar de refugiarse en alguna casa.dat