Internan en el Topo Chico a padrastro de niña que murió por golpes

Monterrey.- Elementos de la Región Norte de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) ejecutaron orden de aprehensión y trasladaron al penal del Topo Chico al trailero que por, supuesto castigo, porque se negó a comer, causó la muerte de una bebé de un año y 10 meses de edad, hija de la mujer con quien desde hace dos meses mantenía una relación sentimental en Matamoros, Tamaulipas.Jaime Iván Hernández Martínez, de 36 años, es considerado presunto responsable del homicidio calificado de la pequeña Nahomi Magdalena Nájera Montalvo, quien pereció a consecuencia de contusión profunda de cráneo, de acuerdo a los resultados de la autopsia.Este lunes, Hernández Martínez, quien radica en la ciudad de El Mante, Tamaulipas fue presentado ante el juez de control regional que lo imputó y ordenó su permanencia en el reclusorio como medida cautelar, mientras concluye el plazo que solicitó su defensor para que le resuelva la situación legal, el cual vence el próximo fin de semana.

Durante la audiencia trascendió que fue el pasado 19 de noviembre, cuando Jaime Iván salió de Matamoros con destino a Apodaca, Nuevo León a recoger una carga de cerveza en una distribuidora ubicada en la carretera Miguel Alemán, en la colonia Ex Hacienda La Encarnación.Alrededor de la 6:00 horas del día 20 de noviembre el hombre detuvo el tráiler de doble remolque que conducía en una tienda de conveniencia para comprar comida y adquirió un jugo y leche para la menor.Por versión de María Gabriela Nájera Montalvo, de 20 años, madre de la niña, los investigadores y el agente del Ministerio Público que integra la carpeta judicial del caso establecieron que la bebé se negó a consumir los alimentos y esa situación molestó a Jaime Iván.

Por lo que, supuestamente, de castigo la tomó de los pies la volteó de cabeza y así la retuvo desde su asiento, durante una hora de camino, hasta las 7 de la mañana del viernes que llegaron al negocio donde iba a recoger la carga.A esa hora le levantó el supuesto castigo y la pequeña se tranquilizó, pero el sábado en la tarde, cuando esperaban regresar a Matamoros, la pequeña se puso mal y horas después murió en la clínica número 19 del Seguro Social, en Apodaca.En un principio, el responsable aseguraba que la menor se había lesionado al caer de la cama del camarote en el que la habían acostado a dormir, pero la autopsia confirmó las lesiones violentas que narró María Gabriela al presentar la denuncia.