Regularización de Uber sigue estacionada en Monterrey

Monterrey.- Mientras en la Ciudad de México las autoridades, los trabajadores del transporte, y la empresa de tecnología Uber, intentan llegar a un acuerdo para regular el servicio que ofrece la aplicación móvil, en Monterrey no se ha registrado ningún tipo de avance.Aunque se han registrado percances y situaciones de reclamo por parte de taxistas y sus sindicatos contra la empresa de servicio de transporte en la zona metropolitana, las quejas no han escalado como las protestas que ocurrieron en la Ciudad de México en semanas pasadas.

Sin embargo, tampoco se ha buscado un consenso para regular el servicio de taxis privados ofrecido mediante Uber. Inclusive, fuentes internas de la empresa aseguran que "todo funciona con normalidad" en la metrópoli regia.En los últimos días, se han dado a conocer los lineamientos o limitaciones que puede tener la empresa Uber para operar en la Ciudad de México, sin embargo se tratan de procesos legales estrictamente locales de la región. Se desconoce todavía si las autoridades de Nuevo León se encuentran realizando este tipo de modificaciones a la regulación.

Hace algunos meses, voceros de la empresa Uber confirmaron en entrevista con este medio que la empresa estaba abierta a buscar una solución con las autoridades mexicanas de todos los niveles para abrir los espacios de trabajo a todas las empresas de transporte.Se trata de un tema de competitividad e innovación en el sector de transporte, aseguró en ese entonces el vocero de Uber para Nuevo León, José Eseverri. Pero los avances en la materia no se han registrado, pese a que han pasado ya más de tres meses.

Uber se encuentra en otras dos entidades por el momento: Jalisco y Querétaro. Pero en esta última la resistencia ha llevado a que el servicio sea catalogado como "taxis piratas", mientras en Jalisco se busca también regular el servicio, aunque sin avances como el de la Ciudad de México.Según datos de la empresa, su crecimiento en la Sultana del Norte ha sido uno de los más grandes y rápidos que ha tenido la aplicación móvil en Latinoamérica, gracias al poder adquisitivo de los regiomontanos.