Abe critica la "peligrosa" maniobra china de intimidación en aguas disputadas

El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, calificó hoy de "peligrosa", "provocativa" y "lamentable" el que una fragata chinautilizara el 30 de enero el radar para fijar como objetivo de sus misiles a una embarcación militar japonesa en aguas del Mar de China Oriental.

""Fue unilateral, un acto provocativo y muy lamentable"", afirmó hoy Abe, en declaraciones recogidas por la agencia Kyodo, después de que el Gobierno nipón anunciara ayer el suceso, que tuvo lugar en la misma zona en la que se encuentran las islas Senkaku, cuya soberanía se disputan Tokio y Pekín.

Según el Ministerio de Defensa, también hay sospechas de que el 19 de enero otra fragata china apuntó también este radar a un helicóptero de las Fuerzas Aéreas japonesas en la misma zona.

El primer ministro japonés, que accedió a su cargo el pasado 26 de diciembre, añadió que la acción de la fragata china fue "un acto peligroso" que pudo haber provocado reacciones imprevistas.

Abe, sin embargo, quiso rebajar la tensión e instó a China a tomar medidas para que la tensión ""no aumente de manera innecesaria"" al tiempo que recordó la importancia de que ambas potencias retomen ""su relación estratégica de mutuo beneficio"".

La tensión entre China y Japón se incrementó el pasado septiembre cuando Tokio anunció la compra de tres de los islotes Senkaku, conocidos en China como Diaoyu. Desde entonces, se han producido fricciones en las aguas disputadas en torno a las islas, deshabitadas y de apenas 7 kilómetros cuadrados, entre patrulleras japonesas y chinas.

Se cree además que la zona en la que se encuentran las islas, cuya soberanía también reclama Taiwán (que las llama Diaoyutai), podría albergar importantes reservas de hidrocarburos.

El conflicto además ha provocado que las relaciones entre la primera y la segunda economía de Asia se hayan deteriorado, lo que ha afectado a los intereses económicos de Japón en China, su primer socio comercial, y provocado protestas antijaponesas. Las islas albergan importantes bancos de pesca y se cree que podrían ocultar además importantes reservas de hidrocarburos.

EFE