Durante un encuentro en Turquía del equipo Banvit Bandirma, Earl Rowland golpeó de atrás a un aficionado que atacó a uno de los jugadores. Afortunadamente la situación fue controlada. Rowland fue expulsado del partido, su compañero Sammy Mejia también fue descalificado del partido a pesar de ser atacado. Es un claro ejemplo de lo que puede suceder cuando aficionados se meten indebidamente a un partido. JOSÉ MANUEL VILLALVA