El árbitro Darío Ubríaco, señalado por su trabajo en la Final de la Copa Libertadores, prefiere la mesura. El silbante uruguayo se apegó a su reglamento y optó por guardar silencio, al intentar conocer su versión sobre lo hecho en la cancha del Monumental.Consultado por MMDeportes, el juez agradeció la llamada; sin embargo, mencionó que no podía declarar sobre el encuentro entre River Plate y Tigres, mismo que marcó su regreso a la actividad después de tres meses ausente. ?Por cuestión de FIFA no podemos hablar después del juego. Le agradezco la llamada, pero no podemos brindar entrevista. Precisamente ayer (jueves) veíamos ese tema?, mencionó Ubríaco, desde Montevideo, Uruguay.Al silbante se le ha señalado por las decisiones que tomó durante el encuentro, principalmente al momento que se registraron entradas ríspidas entre los jugadores.