El polémico árbitro inglés Howard Webb sorprendió a todos durante un partido partido a beneficio y no por sus decisiones con las tarjetas, sino por anotar un penalti al estilo "Panenka". Webb, famoso tras las Final de la Copa del Mundo de Sudáfrica en el 2010, cuando no expulsó a un jugador de Holanda por una falta artera sobre un jugador español, demostró en este juego especial que también puede jugar al futbol. Al momento de tomar el balón y disponerse a patear el penal, Webb lo hizo con gran calma, sin nervios de nada, tal y como es al momento de arbitrar un partido. El silbante tomó camino, observó al portero rival y con la calma de Andrea Pirlo picó la pelota, que entró como en cámara lenta en el arco, mientras el portero se tiraba hacia un costado sin ninguna oportunidad.