A lo largo de la historia, el 16 de julio se ha convertido en un día icónico para el futbol mundial, y principalmente de mucha tristeza para el pueblo brasileño. El 16 de julio de 1950 la selección de Brasil sufrió la derrota más importante de su historia, el "Maracanazo". En la última fecha, de la fase final del Mundial Brasil 1950, el conjunto brasileño necesitaba empatar con Uruguay para consagrarse como campeón del mundo, un partido cuyo resultado final aun no se olvida. Con anotaciones de Juan Alberto Schiaffino y Alcides Ghiggia, después de un tanto del brasileño Friaca, los charrúas se alzaron con el título de monarcas mundiales, ante un desolado pueblo amazónico. El Maracanazo: RAFAEL RIVERA