Debido a que en Perú han mostrado un torneo poco atractivo, la afición no se encuentra contenta y como consecuencia no asisten a los estadios. El partido con las taquillas más bajas fue cuando se enfrentaron los Caimanes contra la Universidad San Marín debido a que sólo asistieron seis personas a ver el partido. En realidad fueron 92 personas las que fueron a ver el juego, pero 86 eran invitados, por lo tanto sólo se vendieron seis boletos para un cupo de 24 mil 500 personas. DIEGO MORENO