Una goleada de 7-1 ante el Celta de Vigo no deslumbró al hijo de Cristiano Ronaldo, quién se la pasó en el celular todo el partido. En una toma que dieron al palco donde se encontraba la familia del portugués, salió su niño metido en el teléfono, mientras su abuela y otros asistentes celebraban las anotaciones del siete merengue.