Después de semanas de espera, el estadio Universitario sintió la intensidad del Clásico Regio, en su edición 105. Como parte de la jornada 9 del Apertura 2015, Tigres enfrentó como local a Rayados, en un duelo de altas expectativas.Al minuto 10 del partido, el delantero francés André-Pierre Gignac estuvo cerca de abrir el marcador para Tigres, pero fue detenido por el arquero Jonathan Orozco. Al ver adelantado al guardameta de la ?Pandilla?, el artillero felino se animó a cobrar fuera del área, jugada que desató la emoción adelantada de los hinchas universitarios.En lo que parecía ser un gol seguro, Orozco sorprendió con un gran lance, con el cual alcanzó a desviar el remate de Gignac con una mano, silenciando al ?Volcán?. Para cerrar su gran gesta, el ?Jona? movió su dedo en señal de no, como símbolo de su atajada.