A falta de aproximadamente de tres horas para el Clásico 106, la reventa no para en las avenidas aledañas al estadio de Rayados.Unos cinco hombres paran a los automovilistas enseñando boletos para el partido regiomontano, a pesar de que la acción es ilegal, algunos carros bajan el vidrio para preguntar los precios. Cabe destacar que el Club de Futbol Monterrey invita a los aficionados vía redes sociales a evitar ser víctimas de la reventa.