La eliminación de Tigres a manos de Monterrey caló hondo en Damián Álvarez.'El Enano' no pudo contener el llanto tras el silbatazo final y tuvo que ser consolado por Hugo Ayala y un utilero. Damián se tranquilizó en los vestidores y se le vio intercambiando saludos con Edwin Cardona y otros miembros de Rayados.El llanto, ¿por impotencia o dolor?