Ciudad de México ? Si Nicolás Maduro gana la presidencia de Venezuela, Gruma, empresa mexicana productora de harina de maíz y tortillas, tendrá un panorama adverso dentro de esa nación, pues continuaría con la política de Hugo Chávez de expropiación de empresas, señaló José María Flores Barrera, especialista de Ve por Más (BX+). En un análisis sobre las elecciones en ese país, prevé que Maduro tendría un mayor control de la actividad económica, al ser más radical en la demostración de su "Chavismo", buscando la legitimidad de su gobierno. Considera que si Henrique Capriles obtiene la presidencia, tendría un efecto positivo para la firma productora de alimentos, ante una mayor apertura a la inversión extranjera. ?Se comprometió a desarrollar un gobierno que no ponga frenos al capital foráneo y que no se basará en la expropiación y la confiscación de la propiedad privada sino en trabajar juntos, el Estado y la empresa privada, por la consolidación de la economía del país?, reiteró. El analista agregó que en ambos escenarios, la primera implicación para los inversionistas sería psicológica (neutral a negativa con Maduro y positiva con Capriles), mientras que la fundamental se daría hasta tener mayores detalles sobre la nueva relación Gruma-gobierno. En mayo de 2010, el gobierno de Chávez expropió las operaciones de Gruma en ese país, las cuales representan 15.7 por ciento de sus ventas totales, con 10 plantas productoras de harina de maíz y de trigo.