Las instalaciones del hotel de concentración de los Diablos se convirtieron en una sucursal de rojo y blanco por más de un centenar de aficionados regios que se dieron a la cita para la firma de autógrafos que convocó el equipo rojo. El Toluca demostró que en la ciudad de Monterrey y sus alrededores cuentan con el amor y la pasión por su equipo.Desde muy temprano el hotel, ubicado en el municipio de San Pedro al sur de la cuidada, junto a un centro comercial conocido, lucía con un color escarlata.Al final, la activación fue todo éxito. Varios jugadores del primer equipo de los Diablos se rotaron para atender a la afición que los esperaban con ansias para obtener la fotografía y el autógrafo del recuerdo con sus ídolos.AM