Y sí hubo caravana...

A pesar de que se había anunciado por parte de las autoridades y las directivas de Tigres y Rayados, que no habría más caravanas previo a los Clásicos Regios, La Adicción y la afición del Monterrey marcharon como siempre rumbo al Volcán, sede de la Ida de la Final de Concachampions.Entre 700 y 800 aficionados albiazules hicieron ver mal a la Policía Regia y a Fuerza Civil, quienes desde temprana hora montaron un operativo para impedir primero, que los seguidores de la Pandilla se reunieran alrededor de la Plaza de Toros como acostumbran hacerlo y segundo, que no marcharan hacia el Universitario y colapsaran la vialidad. No pudieron lograr ninguno de sus objetivos.Aunque unos 200 elementos de seguridad se establecieron en el perímetros, los aficionados de Rayados llegaban en pequeños grupos de no más de cinco personas y repentinamente comenzaron a arribar en grupos de 10-15 o más, hasta llegar a ser alrededor de 700 o más."Tricampeón, tricampeón, dale tricampeón", cantaron en su trayecto los aficionados, quienes comenzaron su caravana al paso del autobús que transportaba al equipo de Diego Alonso.A los agentes de seguridad no les quedó mas que resguardar el trayecto de los barristas, como lo han hecho durante los más de 20 años que tiene de tradición la marcha que realiza la afición del Monterrey.