El corredor de los Seattle Seahawks, Marshawn Lynch es una "bestia" cada vez que acarrea el ovoide. Siempre se ha sabido que le encanta los dulces Skittles.En el programa nocturno de Conan O'Brien le dio la oportunidad a Lynch la oportunidad al saltar a una alberca llena de Skittles.Lynch tomó el balón y saltó, como siempre agarrándose sus partes íntimas y cayó a la enorme alberca repleto Skittles. Para él debió de ser mejor que Navidad. Seguramente nunca había visto tantos Skittles en su vida.Conan O'Brien sí le dio el balón a Lynch y Pete Carroll no.