Tras regresar a las diagonales después del accidente automovilístico que sufrió, Cam Newton lo hizo consiguiendo una anotación frente a los Browns, tras su festejo fue a entregar el ovoide a un niño que se encontraba en las gradas, el problema de esto no fue el acto si no el hecho que en la zona en que lo hizo había dos niños quienes al recibir el balón se enfrascaron en una batalla. Lo que llamó la atención de la pelea es que uno de ellos portaba un sombrero de navideño, por lo que su comportamiento no era lo que uno hubiera esperado de un pequeño que estará esperando a Santa, pero tal vez el balón era más importante que el significado verdadero de la Navidad es por ello que tal vez al niño no le molestará recibir un pedazo de carbón.