Por considerar que la vestimenta que utilizaban para practicar el balonmano playa era meramente por cuestiones de sexismo, las jugadoras protestaron ante este hecho lo que provoco un revuelo mediático. Es por ello que después de tomarlo en consideración el Consejo Superior de Deportes y la Federación Española de Balonmano acordaron eliminar la normativa que obligaba a las jugadoras a usar top y pantaloncillos. Ante esto las jugadoras podrán utilizar la vestimenta de su elección.