En la NFL hay sólo una constante. Los Raiders de Oakland simplemente no ganan. La primera jugada del partido el domingo contra San Diego es una perfecta explicación del porque son tan malos. El quarterback Derek Carr no esperaba que el centro Stefen Wisniewski le mandara el balón, resultando en un fumble que recuperó los Cargadores. Se pueden imaginar, entrenas toda la semana para que en la primera jugada del partido te suceda eso. Los Raiders han perdido 16 juegos al hilo. No ganan desde el 17 de noviembre del 2013. JOSÉ MANUEL VILLALVA