La policía informó que 14 oficiales sufrieron heridas leves y cuatro personas fueron arrestadas después del partido entre Hannover y Braunschweig por la Bundesliga alemana. El derbi del viernes entre los clásicos rivales de la Baja Sajonia terminó 0-0, y la policía utilizó cañones de agua para evitar que los fanáticos revoltosos entraran al estadio. Después del encuentro, la policía utilizó gas lacrimógeno y macanas para controlar a los hinchas violentos. Varios fanáticos también resultaron heridos, pero las autoridades no tenían un estimado de la cifra. Unos 1.000 policías fueron desplegados para el partido. AP