La situación no es sencilla y es que en la noche del martes, como ya se reportó en La Afición, los dirigentes despreciaron una oferta de 500 millones de pesos, y mediante Alberto Tapia, quien es el directivo que servirá como enlace entre el equipo y los eventuales compradores, se determinó que la única oferta que será escuchada será de 50 millones de dólares, libres de polvo y paja, si no llega una cantidad de este calibre, simplemente el Atlas seguirá en las manos de Eugenio Ruiz Orozco y su directiva, como en los últimos cuatro meses. Así pues, los tiradores tienen la oportunidad de mejorar la oferta, retirarla o también se abre la oportunidad para los nuevos tiradores siempre y cuando su primera puja por los rojinegros sea de unos 650 millones de pesos. Jesús Hernández Téllez