Caen presunto extorsionador de comerciantes con 2 menores en Chihuahua

La Fiscalía del estado informó que detuvieron a Marcelo V.C. alías ?El Chato?, de 15 años y Saúl R.V. de 14, cuando cobraban la ?cuota? a un restaurantero. Dijeron que su líder, alías ?El Nacho?, los mandó por el pago.

Chihuahua ? Elementos de la Unidad Especializada en Investigación en Delitos de Extorsión (UEIDE) aseguraron a un presunto extorsionador que operaba con dos menores para ?aplicar? el derecho de piso en comercios de Ciudad Juárez, Chihuahua.

Los agentes, que se encuentran al mando del fiscal General del Estado, Carlos Manuel Salas, aseguraron inicialmente a Marcelo V.C., alías ?El Chato?, de 15 años y a Saúl R.V., alías ?El Flaco? de 14 cuando cobraban la ?cuota? a un restaurantero.

?A las 18:00 horas de este martes llegó Marcelo V. C. y exigió el pago, mientras que Saúl R. V. se quedó realizando funciones de halcón en la puerta principal de restaurante, en cuyas inmediaciones se encontraban los agentes de manera encubierta?.

?Fueron detenidos por los investigadores de la Unidad Antiextorsión y manifestaron que su líder, alías ?El Nacho?, los había mandado a cobrar y que vive en la calle 18 de Marzo 1843 de la colonia El Barreal?, informó la Fiscalía General del Estado (FGE).

Posteriormente, el grupo especial aseguró en términos de la flagrancia a Julio Ignacio Carrillo Méndez, alías, ?El Nacho? de 28 años, quien intentó huir por la puerta trasera de su vivienda con la intensión de evitar su detención.

En la denuncia que presentó la víctima, refirió que tiene un mes pagando 500 pesos por semana, después de que un sujeto que tripulaba una Van color verde le cerró el paso y apuntándole con una pistola, le dijo: tienes que pagar la cuota, si no te mueres?.

?Comentó que en el 2011 pagó semanalmente la extorsión, posteriormente sus agresores dejaron de ir; cabe hacer mención que la víctima identificó plenamente a Carrillo Méndez como quien, un mes atrás lo amenazó y le exigió la cuota?, se indicó.

Se informó que ?El Nacho? fue detenido el 10 de enero de 2011 por extorsión agravada en perjuicio del propietario de una florería y en agosto de 2012, fue absuelto por un Tribunal de Juicio Oral, ya que la víctima no compareció en el proceso judicial.

?También se tuvo conocimiento que Julio Ignacio Carrillo Méndez (a) ?El Nacho?, al quedar en libertad, estaba buscando de nuevo a sus víctimas para volverlas a extorsionar, valiéndose de los adolescentes?, destacó la fiscalía.Entre los acuerdos signados, el edil acepta disolver a su grupo de auto defensa en lo inmediato y ordena que la policía municipal reasuma el control de la vigilancia y patrullaje de la demarcación en coordinación con las fuerzas estatales de seguridad.

En ese sentido se concilia que la policía local del poblado sea sujeta a un programa integral de capacitación para que pueda ser evaluadas y certificadas pasando como es debidos su exámenes de control de confianza.

En un cuarto punto se acuerda iniciar programa de regularización de armamento con apoyo del ejército mexicano y se iniciara la revisión de todas las denuncias ciudadanas que tengan que ver con presuntas abusos o excesos cometidos por los cuerpos de seguridad estatal o federal para actuar en consecuencia.

Un quinto punto tienen que ver con la ejecución en el corto plazo de un plan para implementar programas sociales y generar empleo en la demarcación que permitan reducir los indicadores de desigualdad social y pobreza.

En entrevista el alcalde de Santos Reyes Nopala reconoció que solo quería con la creación de la policía comunitaria la atención del gobierno estatal y aceptó que con la instrumentación de las bases de operaciones mixtas ubicados en diferentes puntos de la zona costera se han mitigado la incidencia delictiva.

Con respecto a la petición que hizo el munícipe para que fueran liberados dos elementos de su policía municipal que fueron detenidos por haber cometidos diversos delitos y omisiones a la ley general de armas de fuego y explosivos se argumento que tendrán que continuar el proceso y demostrar su inocencia.

Juan José García Amaro