Recién finalizó el partido anoche y de inmediato camino al vestidor Juninho le reclamó con empujones algunos detalles del partido a su compañero Israel Jiménez, y este le respondió de la misma forma. Para evitar que la situación llegara a los golpes, algunos jugadores, así como el utilero Jacobo Gómez tuvieron que intervenir para enfriar los ánimos que estaban muy caldeados entre ambos. A pesar de que no hubo gol en contra, Juninho reclamó al canterano felino alguna desatención que consideró muy grave que no pudo esperar hasta entrar al vestuario para reprimirlo de manera privada. Raúl Villarreal