Los hechos se refieren a la detención ilegal, tortura y condena de cárcel sobre las víctimas, detenidas en 1997 y acusadas de poseer armas de fuego de uso exclusivo del Ejército y propaganda del grupo armado Ejército Popular Revolucionario. Ciudad de México.- El Estado mexicano firmó hoy un acuerdo de solución amistosa en el caso de Juan García Cruz y Santiago Sánchez Silvestre para reparar a las víctimas, quienes sufrieron diversas violaciones a sus derechos humanos en 1997. Según explicó en un comunicado la Secretaría de Gobernación (Segob) mexicana en el que no precisó en qué consistirá la reparación, el acuerdo se firmó en la sede de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH), ubicada en San José (Costa Rica). Los hechos se refieren a la detención ilegal, tortura y condena de cárcel sobre las víctimas, detenidas en 1997 y acusadas de poseer armas de fuego de uso exclusivo del Ejército y propaganda del grupo armado Ejército Popular Revolucionario. La subsecretaria de Derechos Humanos de la Segob, Lía Limón, presente en la firma, manifestó que la celebración del acuerdo de solución amistosa para el caso señalado es un acto inédito, porque es la primera vez que el Estado mexicano firma un convenio de este tipo ante la Corte Interamericana. Asimismo, señaló que este acuerdo refleja el compromiso que ha asumido el Estado mexicano para promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos. El testigo de honor en la celebración del acuerdo de solución amistosa fue el Presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Diego García Sayán, quien reconoció el compromiso y la disposición del Estado mexicano para cumplir con sus obligaciones internacionales. EFE