Un grupo de aficionados del América, ubicados en una de las cabeceras de la zona sur del estadio, se confrontó a golpes con elementos de seguridad del Estadio Hidalgo durante el primer tiempo del juego entre Pachuca y América.Todo comenzó en un tiro de esquina en a favor de los Tuzos, el cual fue ejecutado por Daniel Ludueña; los aficionados empezaron a arrojarles vasos y hielos, uno de los cuales pasó cerca del jugador, quien lo reportó con el árbitro Jorge Antonio Pérez que detuvo el juego unos instantes. El sonido local hizo la recomendación, pero la porra siguió sin atender al aviso. En ese momento los elementos de seguridad pretendían detener a los que estaban arrojando cosas al terreno de juego, pero los demás integrantes de la porra empezaron a agredir a los uniformados. Alrededor de 15 minutos duró la gresca, en la que la policía se vio obligada a contestar con macanazos los golpes que aventaban los aficionados. La seguridad fue reforzada en ese sector y los elementos se llevaron a un aficionado que iba sangrando.