El delantero de América abrió el marcador en el partido de vuelta y dio cierta tranquilidad a su equipo para que consiguiera su boleto a las semifinales. Jiménez no marcó en el partido de ida pero fue un constante dolor de cabeza para la defensa universitaria. El jugador de 22 años cuenta con la simpatía de los aficionados pues fue formado en la escuela azulcrema. Cortesía La Afición