Acapulco de Juárez ? A 10 días del paso del huracán ?Manuel?, las playas de la Zona Diamante de Acapulco, en Guerrero, están cubiertas de troncos, árboles, palmeras, animales muertos y basura. Desde el Río Papagayo, el cual suministra agua potable al puerto, hasta el Revolcadero, la cantidad de desperdicios que trajeron las lluvias satura la franja de playa. Se tratan de 26 kilómetros de playa que sufrieron los estragos de los fenómenos climáticos y donde se han encontrado desde sembradíos de sandía, melón, maíz y calabaza, hasta pollos, gallinas, cerdos y un caballo, de acuerdo con autoridades de la delegación federal de Procuraduría Federal de Protección al Ambiente. Habitantes de la zona y empleados de las playas realizan las labores de limpieza para quitar toneladas de desperdicios. Alejandro Madrigal y Javier Trujillo