Guerrero ? Elementos del Ejército se apostaron en la entrada principal de Chilpancingo para convencer a los policías comunitarios del municipio de Tixtla, quienes realizan una marcha para exigir la liberación de uno de los mandos de este grupo, de que no ingresen armados a la capital del estado de Guerrero. Desde que inició la marcha, alrededor de las 11:00 horas, los integrantes de la 35 Zona Militar llegaron a bordo de dos convoyes e instalaron un retén a un kilómetro del crucero de la colonia Indeco, donde esperan la llegada del contingente integrado por policías comunitarios y estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa, quienes exigen la liberación del segundo comandante de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) de la comunidad de El Troncón, Nahum Santos Bartolo. A la altura de la presa de El Molino, sobre la carretera Chilpancingo-Tlapa, se encuentra el director general de Gobernación estatal, Moisés Alcaraz Jiménez, para convencer a los policías comunitarios de que desistan de su intención de llegar a la capital guerrerense. Sobre la misma vía, después de las 13:00 horas, se instaló también un contingente de activistas de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación, para acompañar a los comunitarios y evitar que sean objeto de una agresión. Los policías comunitarios de la CRAC están aproximadamente a una hora de llegar a Chilpancingo, en un recorrido total de 14 kilómetros desde Tixtla. Los contingentes que participan pertenecen a las comunidades de El Troncón, Acatempa, Tecozintla y Zacatzonapa. Los policías comunitarios que participan en la movilización van armados y solamente utilizan un carril de la carretera que comunica a Tlapa de Comonfort para evitar el cierre total de la circulación. ROGELIO AGUSTÍN ESTEBAN