El festejo desmedido de los jugadores rayados frente a la parcialidad felina todavía despierta críticas y enojos. Sin preocuparse por suspicacias, es Cesar Delgado, quien decidió salir al cruce para explicar una situación que considera, merece una aclaración. "Sí, entiendo la queja y no fue adecuado lo que hicimos frente a la hinchada. Si hay personas que se sintieron ofendidas les pido disculpas en mi nombre y el de todo el grupo. Sabemos que no era la forma de festejar y somos muy conscientes que no debe ocurrir otra vez" "¿Mi expulsión? No puedo decir si fue justa o no. En aquel momento fue como una gran descarga emocional frente a mi familia, amigos y mucha gente conocida que suele estar en ese sector. Era el último minuto de un clásico y eso no es poca cosa", aclara y luego detalla: "intenté decir que lo empatamos con huevos. Que fue con mucho amor propio y fue una expresión que no buscaba ofender a nadie. Pero el juez de línea le avisó al arbitró y decidió expulsarme". Con el panorama casi imposible de cara a la liguilla, el partido frente a Atlante será decisivo y Chelito así lo manifiesta. El argentino considera que no existe margen para más equivocaciones y que deben estar muy preparados para lo que viene "Nunca pusimos excusas porque somos un equipo muy completo y sabemos que las cosas no han salido como pretendemos nosotros o la directiva. Hay que seguir trabajando y como grupo levantar el nivel para terminar lo mejor posible" Como el resto de sus compañeros, Delgado expresa que no deben confiarse y mantener la concentración durante los noventa minutos. Explicó que Pumas demostró que deben mejorar ante equipos que se tiran atrás y aprender a doblegarlos es la prioridad para obtener los tres puntos. "Espero que hoy (Atlante) tengamos el amor propio y la actitud que demostramos ante Tigres para llevarnos el triunfo y tres puntos importantísimos". Santiago Fourcade