Monterrey ? El albergue municipal Antonio I. Villarreal amaneció sin vacantes, pues todas las 26 camas que estaban disponibles fueron ocupadas por indigentes y personas sin hogar que fueron recogidos durante la noche en diversos puntos donde acostumbran pernoctar al aire libre. Con una temperatura que llegó desde la noche anterior a los seis grados, elementos de Protección Civil de Monterrey recorrieron los hospitales, plazas, mercados y pasos a desnivel donde acostumbra vivir la gente sin hogar. Todos pasaron la noche calientitos en un catre, bien cobijados y atendidos. Esta mañana les dieron quesadillas, té caliente y hasta rosca de reyes como postre. Al ver la buena atención, algunos se pusieron exigentes o nostálgicos y pidieron galletas. El menú no las incluía, pero con el pan quedaron contentos. Luego de desayunar, los elementos de Protección Civil los llevaron a sus puntos de trabajo y les prometieron que por la tarde pasarían por ellos para llevarlos de nuevo al albergue. El albergue seguirá abierto mientras duren las bajas temperaturas. FRANCISCO ZÚÑIGA