Monterrey.- La familia Meléndez Casas está a punto de perder su patrimonio que tantos años les costó construir, pues fueron víctimas de un fraude. Todo inicio durante el 2009 cuando José Luis Meléndez se encontraba grave de salud, por lo que su esposa y sus hijos optaron por buscar un préstamo para poder salir de los gastos, pero nunca pensaron que esa decisión les podría quitar su casa. José Luis comenta que acudieron a las instalaciones de la empresa Sefi (Servicio Financiero) ubicadas sobre la calle M.M. de Llano en el primer cuadro de Monterrey, y solicitaron un préstamo de 50 mil pesos, pero después de una explicación les aseguraron que éste tendría que ser reembolsado por 80 mil, por lo que aceptaron. Tras el acuerdo, se dieron cita en la notaria 137 en el municipio de San Pedro para firmar el contrato, el cual se encontraba con una serie de anomalías, iniciando por negarles a los solicitadores el leer la papelería. Después de esta firma, las actitudes de Ricardo Gallardo, uno de los representantes de la empresa prestamista, amenazó a la familia con quitarles la casa si fallaban con una de las cláusulas del contrato, las cuales desconocía, pues no lo pudieron leer. Ellos realizaron pagos de 4 mil pesos durante un año y medio, pero a pesar de haber realizado éstos, a su domicilio llegó una demanda mercantil por falta de pago. Asustados acudieron con Yesenia González, trabajadora de Sefi, la cual les aseguró que no tenían validez. Una vez que decidieron acudir a rectificar el juicio se sorprendieron, pues de acuerdo al contrato la familia Meléndez habían solicitado 272 mil 908 pesos, precio en el que se encuentra avalada la vivienda de la familia, por lo que se sorprendieron pues la deuda ya era mayor a los 700 mil pesos. Irma Patricia Casas Ávila y José Luis Meléndez Rojas, piden ayuda de las autoridades pues a pesar de que ya han solicitado asesoría aún no han tenido respuesta de ninguna de ellas y tienen miedo a perder su patrimonio por una injusticia. DENISSE MESTA