Ronda Rousey volvió a ganar por palanca al brazo ante Miesha Tate, sin embargo, la retadora mostró una buena estrategia y logró llevar el combate hasta el tercer episodio. Intercambio de pie entre ambas y el primer asalto se inclinó ligeramente en favor de la retadora. El segundo fue de dominio total para Rousey, sin embargo no tuvo la efectividad de siempre para someter con palanca al brazo. Finalmente el movimiento característico de Rousey llegó en el tercer round y logró su segunda defensa del cetro gallo femenil del UFC. La campeona mostró poca clase al dejar a Tate con la mano estirada al finalizar el combate.