Monterrey ? El vehículo dio varias vueltas y finalizó destrozado en el estacionamiento de una funeraria en la colonia Revolución. Era ya la media noche y los menores Víctor de 16 y Eduardo de 17, se dirigían a su domicilio, después de haber asistido a una fiesta en la colonia Las Águilas, en el municipio de Guadalupe. Iban a bordo de un automóvil Malibu en color blanco con las placas SNS 7309 y detrás de ellos viajaba otro grupo de amigos en un vehículo Mustang. Al llegar al retorno que se encuentra sobre la avenida Revolución a la altura de la privada Los Remates, Eduardo, quien iba al volante del Malibu, se descontroló al ver que un tráiler pasaba cerca de ellos. Esto hizo que pisara el acelerador a fondo, al momento que entraba al retorno por lo que el automóvil sin control alguno, se fue directo al estacionamiento de la funeraria, donde quedó volcado y completamente destrozado. Los amigos que viajaban detrás de ellos, detuvieron su marcha para auxiliar a los ocupantes del vehículo accidentado y solicitaron la presencia de una ambulancia de la Cruz Verde de Monterrey. A pesar de que presentaban golpes de consideración, ambos menores de edad se negaron a ser trasladados a un hospital, púes manifestaban que se encontraban bien. Los empleados de la funeraria salieron para ver lo sucedido y se sorprendieron al ver las condiciones en las que había terminado el vehículo. FRANCISCO JAVIER CANTÚ