Monterrey ? El ciclo de cosecha en el campo de Nuevo León se perdió completamente debido a la sequía persistente que está resintiendo el país. Como consecuencia el gobierno estatal emitió un plan emergente para abastecer de agua potable y agua para el campo ciertas zonas del estado que se han visto particularmente afectadas. En rueda de prensa el mandatario estatal, Rodrigo Medina de la Cruz, dio a conocer una inversión por 450 millones de pesos para la rehabilitación de pozos y pipas municipales para consumo humano y del campo. Señaló que en 14 municipios del estado ya se puede hablar de sequía grave y se buscará la declaratoria en 45 ayuntamientos para que se puedan poner en marcha programas federales de apoyo. A pesar del escenario adverso el director de Agua y Drenaje de Monterrey, Emilio Rangel, descartó el corte del suministro en el área metropolitana pero señaló que podría considerarse bajar la presión en algunas horas del día. DANIELA MENDOZA