Agencias locales indicaron que una ambulancia fue abandonada cuando le tiraron petardos, piedras y palos. Al enterarse de los desmanes, el alcalde de Roma Gianni Alemanno pidió calma a la afición. Hay abundante presencia policial alrededor del Estadio Olímpico y los negocios de la zona cerraron temprano por temor a desmanes. Ap