Estados Unidos.- Desde que la NASA retiró su programa de navas espaciales en 2011, los estadounidenses han dependido de Rusia y sus vehículos Soyuz para viajar a la Estación Espacial Internacional (EEI). Pero la agencia espacial firmó un contrato con las empresas Boeing y SpaceX con un valor de 6,800 millones de dólares para contribuir a la construcción de las nuevas naves espaciales, en donde viajarán siete astronautas. Los desacuerdos con el gobierno de Moscú sobre los acontecimientos en Ucrania pueden ser un factor negativo a los acuerdos sobre el uso de las naves por parte de Estados Unidos. Otro factor que se presenta es el pago a los astronautas, debido a que Rusia cobra 70 millones de dólares por cada astronauta que viaja al espacio, suma que los funcionarios de Estados Unidos consideran exagerada. FOTO: Especial TELEDIARIO DIGITAL