Probar cosas nuevas siempre ha sido un tema inquietante para los adolescentes y más si se trata de juegos extremos. Esta es la historia de Aimé, una jovencita de 24 años quien por aventurarse y subirse a una tirolesa sufrió la peor experiencia que la marcó de por vida.Quién iba a imaginarse que su adrenalina provocaría este tipo de consecuencias en una chica que tiene toda una vida por delante. La vida nos puede cambiar en un segundo y a Aimé le cambió radicalmente.¡Entérate en este video de lo que le pasó a esta chica después de haberse subido a esta tirolesa!