Monterrey.- En una tienda de campaña sobre la banqueta vive una pareja de la tercera edad, sin comodidad pero son felices.Calisto Hernández Murillo de 74 años se encontraba solo en lo que llama casa, escuchando música y acompañado de su perrita Chiquis.Platicó que junto a su esposa vivía en la Colonia Fabriles pero un día ya no quisieron rentarles la casa y desde entonces están en la calle David Berlanga y Rafael Nájera en la colonia Francisco I Madero en Monterrey.Los vecinos les dan comida, o ellos compran con el dinero que ganan al día vendiendo cartón y latas. Maria Del Carmen Carrizales, esposa de Calisto, se encontraba en la Iglesia, pues acude constantemente a dar gracias por tener salud. Ellos señalan que tenían una casa pero les hicieron una mala jugada y la perdieron. Su espíritu y ganas de vivir se notan son felices al tenerse uno al otro.Solo quieren un terreno donde vivir antes de que las temperaturas disminuyan y su salud complique al estar expuestos.