WASHINGTON.- El presidente Donald Trump dijo que los estadounidenses no se deben de preocupar por las llamadas telefónicas "fuertes" que ha tenido con otros mandatarios del mundo."Tenemos que ser duros", dijo Trump durante un evento llamado National Prayer Breakfast. Agregó que el mundo está "en problemas" y que otros países han estado aprovechándose de Estados Unidos, pero que su gobierno "corregirá eso". Trump hizo los comentarios después de que trascendieran reportes sobre sus llamadas con los mandatarios de México y Australia.Un funcionario de la Casa Blanca dijo que los comentarios de Trump al presidente de México Enrique Peña Nieto, de que enviaría soldados a ese país para parar a los "bad hombres que hay allí", tuvieron un "tono a la ligera".En la conversación con el primer Ministro de Australia, The Washington Post publicó que Trump describió el plan de reubicación de refugiados como "el peor acuerdo de la historia" y acusó a Australia de intentar exportar "los próximos atacantes de Boston".Según el diario, estaba previsto que la llamada se extendiera por una hora, pero Trump la cortó a los 25 minutos, cuando su par australiano, Malcolm Turnbull, intentó pasar a otros asuntos, como Siria.