Monterrey.- Tras reconocer que tiene a su hermana, a su cuñada y a su concuño en la nómina del Municipio de Apodaca, el alcalde Raymundo Flores Elizondo dijo, sin expedientes en mano, que fueron otras administraciones las que contrataron a sus familiares. De las "auto rentas" de locales que son propiedad de su esposa y su prima, el edil afirmó que está dentro de lo legal, pero admitió que para evitar "malas interpretaciones" cancelaría el convenio y hasta regresaría las 15 rentas pagadas. A quienes negó como familia fue a Anacleto y Artemio Flores González, a quienes en 2007 -cuando fue alcalde por segunda vez- los llamó "primos lejanos". "Ó sea en Apodaca el que se apellide Flores, Guajardo o Elizondo, es una circunstancia bastante común, pero Anacleto y Artemio no tienen nada que ver conmigo", aseguró el edil. De los pagos hechos a María Guadalupe Flores Elizondo, quien aclaró es su prima, dijo que es un adeudo pendiente desde la gestión de Benito Caballero, la cual se cubre en pagos. "Es un pago de un adeudo mucho más superior que adquirió la administración que adquirió la administración anterior, que engloba adeudos por más de un millón de pesos", mencionó. Elizondo Flores aseveró que el hecho de trabajar en familia no significa incurrir en una falta por nepotismo. JOSÉ PLATA