Monterrey.- Familiares, amigos y conocidos de Verónica Navarro y de su hijo Eduardo Villanueva acudieron al panteón Jardín de la Sierra ubicado en Juárez para darles el último adiós, luego de que fallecieran en un ataque a balazos afuera de un bar en el municipio de San Nicolás de los Garza, siendo víctimas inocentes. Alrededor de las 16:00 horas de este lunes partió el cortejo fúnebre de las Capillas Dolores ubicadas en el centro de Monterrey y finalmente llegó al cementerio ubicado en el Fraccionamiento Las Espinas. Los cuerpos iban en dos carrosas y decenas de personas acudieron para despedir a la maestra de la secundaria 28 y al joven estudiante de la Facultad de Ciencias Políticas y Administración de la UANL. El dolor se podía ver en sus rostros, pues no dan crédito a la tragedia que se registró justo el 10 de mayo y donde madre e hijo perdieran la vida en hechos ajenos a ellos. El ataque se registró el sábado por la noche en el bar Martiber, cuando hombres a bordo de un taxi llegaron y accionaron un arma larga. Marilú Oviedo