A un mes del incendio, permanecen las cenizas de la tragedia

Escobedo.- Hoy hace un mes una bodega aceitera ubicada sobre la calle Allende, en plena cabecera de Escobedo, comenzó a incendiarse, mientras el aceite comenzó a filtrarse por las calles, que dejaron de ser de pavimento para convertirse en ríos de fuego.El siniestro se prolongó hasta seis manzanas más, por lo que se desalojó a cerca de 80 familias del sector, sin embargo la cifra de viviendas afectadas ascendió a 24 e incluso se requirió el apoyo del Ejército Mexicano y el Plan DN III.Dentro de la bodega, los empleados trataron de salir, aunque desafortunadamente dos de ellos murieron calcinados. Se trata de Ángel Bermúdez Mares, de 16 años, y su sobrino Cristian Bermúdez Cerda, de 17.

Un día después se dio a conocer que la bodega es propiedad de un ex alcalde de Escobedo, de nombre Sergio Elizondo, misma que no contaba con los permisos para que operara el material que almacenaba. Incluso, los vecinos señalaron que ya existían denuncias contra el inmueble, que no es la única propiedad de Elizondo.Mientras tanto, la empresa aceitera con razón social Industrias Quima, es propiedad de Juan Daniel Requenes Esquivel y el monto económico de los daños no ha sido informado.De acuerdo a Comunicación Social de Escobedo, ese dato forma parte de la carpeta de investigación en la Procuraduría General de Justicia en el Estado.

Por su parte, El municipio de Escobedo informó que de las 40 casas afectadas, cuatro de ellas serían demolidas, y su construcción tendría un lapso de seis meses, corriendo con los gastos de reconstrucción y reparación de daños por parte del Ayuntamiento.Pero el daño afectó a todo el estado. En su combate al fuego, el Patronato de Bomberos de Nuevo León perdió todo su equipo al quedar inservible, y requiriendo un millón de pesos para reponerlo. Comenzó así una campaña en la que en cinco días la ciudadanía apoyó y logró reunirse la meta.Aunque la ciudadanía hizo lo propio, la autoridad quedó pendiente, pues el propietario de la bodega incluso fue boletineado por la Interpol al no acudir a declarar.

En las casas afectadas continúan los trabajos de albañilería, otros domicilios fueron derrumbados y el compromiso de la autoridad ha sido la reconstrucción de los inmuebles, aunque algunos dudan de esta promesa, debido a que le quedan pocos días la administración municipal.La bodega sigue bajo la investigación de los peritos, que después de un mes no han concluido sus labores.Pero hoy la situación no es muy distinta. A un mes de los hechos algunos de los afectados se han mudado a vivir con familiares, esperando las reparaciones de sus viviendas.