Monterrey.- Virginia Buenrostro Romero desde noviembre del 2010 vive con el dolor de la desaparición de su hija e hijo a manos de presuntos secuestradores quienes también se llevaron al novio de su hija y a un empleado. El 15 de noviembre del 2010 cambió su vida y su libertad por de la de sus seres queridos. Ese mismo día que Virginia fue liberada durante un operativo de las autoridades, los delincuentes le arrebataron a Jocelyn, de 27 años y a su hijo David, de 26. Ahora su fuerza son sus otros hijos y Dios, a quien cada día le pide fuerza para continuar en la busqueda de sus familiares. Hasta la fecha, 15 de los 20 presuntos responsables han sido consignados, pero se apegan al artículo 20 constitucional para para no declarar. GUADALUPE SÁNCHEZ