Monterrey.- "Mi hija Cordelia está gordita... y su mamá, hermanos y yo la adoramos", afirmó el ex gobernador Sócrates Rizzo García con relación a la declaración del mandatario estatal Jaime Rodríguez, quien provocó polémica al decir: "a una niña gorda nadie la quiere".Rizzo García lamentó el desafortunado mensaje por parte del gobernador de Nuevo León durante la instalación de la Red Neoleonesa de Universidades Promotoras de la Salud."Hay forma de decir las cosas, de elaborar las frases, yo opino que con reconocer que hay un problema de obesidad que afecta la salud y desafortunadamente también se estigmatiza a veces por discriminación cultural y es una carga adicional", precisó. El ex gobernador manifestó que el cuidado de la salud es parte de los programas de Gobierno al colocarse México en los primeros lugares en obesidad."Entonces hay ese estigma cultural, ese sesgo de discriminación y bullying", destacó Sócrates Rizzo.Tras la polémica que ocasionó el comentario del gobernador Jaime Rodríguez Calderón, el mandatario explicó que no se refería a las niñas con problemas de obesidad, sino, a las menores embarazadas.