MONTERREY.- El futbol es un deporte que genera emociones? en él existen figuras dignas de reconocer; Alan Oziel Sánchez Vélez es un ejemplo de vida, a base de disciplina, esfuerzo y actitud, ha demostrado que no existen impedimentos para seguir un sueño. Hoy, a sus 23 años, el dorsal número 9 del equipo Tigres Amputados de la UANL, es uno de los goleadores de la Liga Mexicana de Futbol de Amputados con 18 tantos. Los Tigres disputaron la final contra su similar de Dragones del Estado de México, un duelo que fue muy emotivo en el que se coronaron tricampeones al vencer 2 por 0, los dos goles por conducto de Oziel. Pero, ¿qué era de él antes de ser jugador de los felinos?A los cinco años, Oziel sufrió un accidente que le quitó su pierna izquierda, esto nunca fue impedimento para hacer lo que más le gusta... jugar al futbol. "Yo tuve un accidente, a los cinco años me cayó una barda de block en la pierna, fue una guillotina que me la partió y bueno, eso no impidió que siguiera mi sueño: jugar futbol" dice.Para perseguir su sueño, por más de siete años, utilizaba una prótesis y jugaba de portero en el equipo del barrio. El deporte le ha dado lo necesario para seguir adelante, y ahora requiere una prótesis para el uso diario. "Gracias al deporte pude salir a delante, gracias al futbol, al atletismo que también practico, hago mi vida lo más normal posible". "El mensaje es que pese a que uno tiene obstáculos o situaciones que la vida nos pone siempre hay maneras de brincar ese obstáculo y seguir nuestro sueño y cumplirlo".dat