MONTERREY.- El Grupo de Coordinación Operativa en materia de Seguridad se reunió como cada miércoles en el palacio de gobierno para dar a conocer un panorama general sobre el recuento de los daños que ha ocasionado la violencia en Nuevo León, así como las acciones y estrategias para que estos hechos no se multipliquen.Apenas la semana pasada las autoridades estatales y federales informaron el refuerzo del operativo en la frontera con Tamaulipas, pero cuatro días después se registró un enfrentamiento entre policías estatales y civiles armados en Vallecillo, Nuevo León, y que culminó en territorio tamaulipeco. Este acontecimiento puso en jaque a las autoridades de ambos estados, luego que se contradijeran en sus versiones. Nuevo León aseguró que un policía de Fuerza Civil murió y otro resultó herido, descartando más hechos delincuencias, mientras que Tamaulipas confirmó lo anterior y añadió que su policía estatal rescató a ocho efectivos neoloneses que se encontraban secuestrados por el crimen organizado. Mientras tanto, las autoridades del gabinete del gobernador Rodrigo Medina, así como representantes del Ejército Mexicano, la Policía Federal y de la Sedena, analizaron las estrategias para evitar más enfrentamientos, aseguró ayer el general Rigoberto García Cortés, comandante de la Séptima Zona Militar.