El actor estadounidense recorre diversos locales de comida rápida para comprobar si realmente ellos cumplían con su publicidad y productos La solución es: Si no te gusta su apariencia, pide que la mejoren. El comediante de 46 años logró que en cada uno de los restaurantes le hicieran el alimento y que fuera igual o mejor que el de la publicidad. FOTO: Youtube TELEDIARIO DIGITAL